28/2/11

El afortunado fin

¡Qué extraños que somos los hombres! No han pasado cinco minutos de mi venganza y empiezo a preguntarme si la venganza puede alcanzarse en esta vida precaria. ¿Quién podrá remediar el mal que hizo? (...) ¡La existencia del hombre es tan poca cosa cuando se le da fin, y una cosa tan grande cuando se usa para algo! ¡Ay! - se lamentó-. ¿Hay algo peor en la vida que obtener lo que se quiere?

23/2/11

El club de los suicidas

Ahora bien, sabemos que la vida es sólo un escenario para hacer de locos mientras uno se divierta. Había un servicio más que faltaba a la comodidad moderna: una manera decente, fácil, de abandonar el escenario; las escaleras traseras a la libertad;o, como he dicho hace un momento, la puerta secreta de la muerte. (...) Hasta cierto punto éste es mi caso. No puedo ponerme una pistola en la cabeza y apretar el gatillo. Algo más fuerte que yo mismo impide la acción; y, aunque detesto la vida, no tengo fuerza material suficiente para abrazar la muerte y acabar con todo. Para la gente como yo, y para todos los que desean salir de la espiral sin escándalo póstumo, se ha inaugurado el club de los suicidas.

Robert L. Stevenson

10/2/11

The dark side

El antes y el después.
Quien lo diría, quien lo pudiera imaginar.
Pame, idola, gracias por la transformación. :)